La procesionaria es una oruga que puede ser muy peligrosa para los perros. Cuando la oruga se siente amenazada, libera unos pelos urticantes que pueden provocar reacciones alérgicas y graves lesiones en la boca, lengua, garganta y vías respiratorias del perro.
A continuación, te explicamos todo lo que necesitas saber sobre la procesionaria en perros: desde sus síntomas y tratamiento, hasta las medidas que puedes tomar para prevenir que tu perro sufra una intoxicación.
Síntomas de la procesionaria en perros
Si tu perro entra en contacto con una oruga procesionaria, es posible que presente algunos de los siguientes síntomas:
- Inflamación en la boca, lengua y garganta
- Dificultad para tragar y respirar
- Vómitos y diarrea
- Salivación excesiva
- Lagrimeo y conjuntivitis
- Aparición de urticaria y erupciones en la piel
En casos más graves, la intoxicación puede derivar en un shock anafiláctico y, en algunos casos, en la muerte del animal.
Tratamiento de la procesionaria en perros
Si sospechas que tu perro ha tenido contacto con una oruga procesionaria, debes llevarlo al veterinario inmediatamente. El tratamiento dependerá del grado de intoxicación del animal y puede incluir:
- Limpieza de la zona afectada con suero fisiológico
- Administración de corticoides y antihistamínicos para reducir la inflamación y aliviar el dolor
- Oxigenoterapia, en caso de que el perro tenga dificultad para respirar
- Intubación, en casos más graves, para asegurar la vía aérea del perro
- Hospitalización y monitorización del animal durante varias horas para garantizar su recuperación
Prevención de la procesionaria en perros
La mejor forma de prevenir la intoxicación por procesionaria en perros es evitar que el animal entre en contacto con la oruga. Para ello, debes tener en cuenta las siguientes medidas:
- Evita pasear a tu perro por zonas donde haya pinos o cedros, ya que suelen ser los árboles preferidos por la procesionaria.
- Si tu perro suele estar en contacto con la naturaleza, asegúrate de que lleve collar y correa para poder controlarlo y evitar que se acerque a las orugas.
- Si notas la presencia de orugas en un parque o jardín, avisa a las autoridades para que tomen las medidas oportunas y las eliminen.
- Si tienes un jardín en casa, puedes utilizar insecticidas específicos para procesionarias para evitar que las orugas se instalen en los árboles.
En conclusión, la procesionaria es un peligro potencial para los perros y es importante estar alerta y tomar medidas preventivas para evitar una intoxicación. Si tu perro presenta alguno de los síntomas mencionados, acude de inmediato al veterinario para que le proporcione el tratamiento adecuado.